Electromovilidad y aranceles tienen en jaque a la industria automotriz
- Lourdes Sierra A.
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CONTRASTES PROFUNDOS impactan a la industria automotriz México, por embates arancelarios e incremento en la demanda de automotores eléctricos que alientan inversiones y cierran plantas. El reto para las empresas en esta transición es complicado si quieren seguir aprovechando las ventajas competitivas del país, en su posición geográfica y mano de obra.
Georg F. W. Schaffler, accionista familiar y presidente de la Junta de Supervisión de Schaffler AG, al inaugurar la primer fase del Centro de Innovación de Schaeffler México, en Huejotzingo, Puebla, destacó que hace años no había problemas de tarifas, pero tienen confianza en el país y su futuro por lo que siguen invirtiendo como, por ejemplo, en este complejo de 406.790 millones de pesos que desarrollará tecnología para la electromovilidad, incluyendo materias.
Svein Azcué, CEO de Chirey Motor México, fue más determinante al decir que pase a que aumenten los aranceles al 35 % o 50 % en México a los países como China con quien no se tiene un acuerdo comercial, Chirey no se va del país, ya que Chery Holding Group lo tiene calificado con 5 estrellas por el tamaño de su industria que produce 3.5 millones de autos anuales, por su posición geografía que facilita las exportaciones a Norteamérica y Centroamérica y por su mano de obra, que agregaría de bajo costo y alta calidad.
EN CONTRASTE, Cooperation Manufacturing Pant Aguascalientes (COMPAS) cierra el 31 de mayo del 2026 por cambios en la industria y de comportamiento de consumo. Produce el QX50 y QX55 de Infiniti hasta el 1 de noviembre del presente año y el Mercedes Benz GLB que se dejará de manufacturar en mayo de 2026. Ambos modelos se exportan principalmente a los mercados de Estados Unidos y Canadá. Con este cierre de planta, se pierden 800 fuentes de trabajo en Aguascalientes, entidad de vocación automotriz.
EN TANTO, Marcelo Ebrard, secretario de Economía, calma los ánimos en la Cámara de Diputados y en el sector automotriz al mencionar que hay un avance del 90 % en las negociaciones de los aranceles entre México y Estados Unidos. Pronto sabremos el éxito de la negociación ya que solo faltan unos días para el 1 de noviembre, en que se cumplen los 90 días de plazo establecido por EU, para aplicar el aumento del 25 al 30 % de arancel a los productos que no cumplen con las reglas de origen del T-MEC.
SIN EMBARGO, el sentir de líderes y empresarios de la industria y el comercio automotriz, que aporta casi el 4 % del PIB del país, es de incertidumbre porque para el temperamento del presidente Donald Trump se espera una nueva amenaza arancelaria ya que hay ocho meses para el 1 de julio del 2026, en que se decide si se extiende el T-MEC por 16 años más.




















